Tlaxcala, Tlax.- El Ayuntamiento de Tlaxcala, encabezado por el presidente municipal Alfonso Sánchez García, se unió al Segundo Simulacro Nacional 2025 al mediodía, con el objetivo de fortalecer la cultura de la prevención y fomentar la preparación de la ciudadanía frente a fenómenos naturales y emergencias.
Activación de la alerta sísmica
En punto de las 12:00 horas, la alerta sísmica sonó en el Palacio del Ayuntamiento, iniciando el ejercicio organizado por la Coordinación de Protección Civil Municipal.
Las áreas del gobierno municipal realizaron el desalojo del inmueble siguiendo los protocolos de seguridad, para posteriormente concentrarse en los puntos de reunión asignados.
Hipótesis del simulacro
La hipótesis planteada fue un sismo de magnitud 8.1 con epicentro en Michoacán y 20 kilómetros de profundidad. Este escenario permitió medir tiempos de respuesta y evaluar la capacidad de organización de los participantes.
Escenarios adicionales de emergencia
Además del sismo, se simularon dos situaciones más:
- Conato de incendio.
- Atención a una persona con quemaduras de segundo grado.
Ambos casos pusieron a prueba los procedimientos de reacción inmediata en situaciones de riesgo.
Participación y tiempos de respuesta
Un total de 200 trabajadores municipales participaron en la evacuación, logrando desalojar el edificio en 2 minutos.
La duración completa del simulacro fue de 12 minutos, con la participación activa de la Dirección de Seguridad, Protección Ciudadana y Movilidad, encargada de la organización y vigilancia del proceso.
Compromiso del Ayuntamiento de Tlaxcala
El simulacro también se llevó a cabo de forma simultánea en otras sedes municipales de la capital.
Al finalizar, el edil Alfonso Sánchez García destacó la importancia de estos ejercicios, al considerarlos una muestra de responsabilidad que puede marcar la diferencia ante una emergencia real.
El Ayuntamiento de Tlaxcala reiteró su compromiso de mantener estrategias de prevención y capacitación continua en Protección Civil, con el propósito de salvaguardar la integridad de la población.