Puebla, Pue.– A menos de cumplir un año de gestión, el gobierno municipal encabezado por José Chedraui Budib asegura haber reducido de manera significativa la deuda heredada de administraciones pasadas, así lo informó el tesorero Héctor González Cobián.
De los 570 millones de pesos que se encontraron como pasivo al inicio de la administración, actualmente solo queda pendiente un monto de 60 millones, detalló el funcionario.
Explicó que este remanente corresponde a contratos con proveedores que no cumplieron con las disposiciones legales y fiscales exigidas por la Secretaría de Hacienda y el SAT, lo que impide su liquidación.
“Si se cubrieran esos pagos sin que existan las condiciones jurídicas necesarias, el Ayuntamiento estaría incurriendo en una irregularidad”, señaló.
González Cobián destacó que la instrucción del alcalde es mantener finanzas públicas sanas y transparentes, garantizando que los recursos municipales se apliquen de manera responsable.
Con esta reducción, el Ayuntamiento busca cerrar un capítulo de compromisos financieros que, según el tesorero, fueron heredados por anteriores gobiernos panistas y que afectaron las arcas municipales.