Un operativo de alto impacto logró desarticular una red criminal ligada al cártel de La Familia Michoacana, que controlaba actividades comerciales en 14 municipios del Estado de México y Quintana Roo. La operación, llamada “Libertad”, derivó en la captura de ocho personas, entre ellas una regidora municipal.
La estrategia se desarrolló tras seis meses de investigaciones y más de 50 cateos simultáneos a negocios usados para acaparar productos y extorsionar a comerciantes.
Extorsión, sobreprecios y violencia contra comerciantes
La organización criminal obligaba a los comerciantes a comprar productos en puntos de venta controlados por ellos, donde se ofrecían a sobrecostos de hasta 130%. Quienes se negaban sufrían violencia física, verbal o psicológica.
Según autoridades, el grupo operaba bajo una “estructura gerencial” que controlaba sectores clave como la venta de alimentos, materiales de construcción y productos agrícolas. Se aseguraron 52 propiedades, entre ellas:
- 6 minas
- 24 casas de materiales
- Granjas, carnicerías y madererías
- Un rastro, un hotel y un rancho
Entre los detenidos, una regidora y un supuesto empresario
Uno de los casos que más llamó la atención fue la captura de Yareli “N”, regidora del municipio de Ixtapan de la Sal, acusada de secuestro exprés con fines de extorsión. Se le dictó prisión preventiva y su situación legal se definirá el 26 de julio.
También fue aprehendido Eli “N”, quien se hacía pasar por empresario y era considerado una pieza clave dentro de la estructura criminal.
El grupo tenía control total del comercio local
José Luis Cervantes Martínez, fiscal del Estado de México, explicó que la organización incluso falsificaba marcas y usaba ilegalmente nombres comerciales como "Constructorama" para vender productos acaparados.
Además de alimentos como huevo, carne y verduras, también manejaban productos industriales, agrícolas y de construcción, dominando así la economía de varias comunidades.
Apoyo federal y estatal contra el crimen organizado
En la operación “Libertad” participaron 63 células de fuerzas federales y locales. El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, destacó la urgencia de frenar a este grupo para recuperar la tranquilidad de miles de familias.
El cártel operaba bajo las órdenes de Johnny “El Pez” y José Alfredo “La Fresa” Hurtado Olascoaga, identificados como los líderes de La Familia Michoacana y actualmente en libertad. Habitantes de Arcelia, Guerrero, señalan que siguen siendo “intocables”.
Recuperación de bienes y apoyo a la población
Se incautaron toneladas de alimentos y materiales, los cuales serán restituidos a la población bajo supervisión judicial. Esta acción representa un golpe directo al control criminal sobre la economía local.