Por: Cortesía

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Fertilidad masculina podría ser afectada por el virus del covid-19

Uno de los mitos que circulan en torno a las vacunas contra el COVID-19 es que provocan esterilidad y disfunción erectil en los hombres. Sin embargo, esto es falso. Incluso especialistas coinciden en que es más probable que el virus provoque estos padecimientos. 

De acuerdo con un estudio realizado por médicos e investigadores de la Universidad de Miami, el virus de COVID-19 sí puede provocar infertilidad en los hombres. 

En un análisis realizado en los testículos de seis hombres que murieron por la infección, se pudo encontrar el virus en los tejidos de uno de ellos; en otros tres se mostró una reducción de espermatozoides que se relaciona directamente con la infertilidad.

También se analizaron los testiculos de un hombre que sobrevivió al virus. Una biopsia mostró que el coronavirus permanecía en sus tejidos aún cuando habían pasado tres meses desde su recuperación.

En ese sentido se pudo comprobar que el virus sí afecta, mientras que las vacunas COVID-19 no lo hacen, contrario a los mitos que giran en torno a los biológicos que se aplican en todo el mundo. 

De acuerdo con el estudio Parámetros de los espermatozoides antes y después de la vacunación con ARNm de COVID-19, no hay una influencia negativa de la vacuna sobre la capacidad reproductiva.

Los investigadores estudiaron el esperma de 45 hombres antes y después de la vacunación con un preparado de tecnología mRNA, y no constataron ningún tipo de afectación a la fertilidad masculina.

"Los hombres fueron evaluados previamente para asegurarse de que no tuvieran problemas de fertilidad subyacentes. Se excluyeron aquellos con síntomas de COVID-19 o un resultado de prueba positivo dentro de los 90 días. Los participantes proporcionaron una muestra de semen después de 2 a 7 días de abstinencia, antes de recibir la primera dosis de vacuna y aproximadamente 70 días después de la segunda", destaca el estudio.

Tras la aplicación de la segunda dosis de la vacuna se descubrió que la concentración media de espermatozoides aumentó significativamente a 30 millones. "El volumen de semen y la motilidad de los espermatozoides también aumentaron significativamente", destacaron los especialistas.