Pobladores de Acatlán de Pérez, Oaxaca, se manifestaron frente a Palacio Nacional para exigir la liberación inmediata de Amayrani Aguilar y Griselda Trujillo, madre e hija detenidas en su domicilio por elementos de la policía de Tabasco.
Con pancartas que decían “son inocentes” y “se las llevaron sin pruebas ni orden de aprehensión”, los manifestantes denunciaron irregularidades en el procedimiento de captura.
Detenidas en Oaxaca, acusadas por crimen en Tabasco
Las mujeres fueron arrestadas el pasado 31 de mayo en el poblado de Barbasco, en Acatlán de Pérez, por su presunta relación con el asesinato de cuatro mecánicos ocurrido el 19 de mayo en Huimanguillo, Tabasco.
Según testigos, la detención fue ejecutada sin mostrar una orden judicial y sin pruebas contundentes. Familiares afirman que fueron engañadas para salir de su hogar y que no hay elementos que las vinculen con el crimen.
Familia denuncia irregularidades en el proceso legal
Una familiar declaró que la Fiscalía de Tabasco las acusa de desaparición y homicidio, pero no se han presentado pruebas formales ni cargos judiciales claros. “Acusan a tres de mis nietos y a mi hija, pero no tienen nada que ver”, comentó a medios de comunicación el pasado 19 de julio.
El caso de los cuatro mecánicos asesinados en Huimanguillo
Los mecánicos Gabriel Murillo (48), José Genaro (38), Juan Cordero (45) y Nelson Díaz (14) desaparecieron el 7 de mayo tras acudir a reparar un tráiler. Días después, sus cuerpos calcinados fueron hallados en Cárdenas, Tabasco y confirmados por análisis genéticos.
Medios locales señalan que las mujeres oaxaqueñas habrían solicitado el servicio mecánico, lo que podría explicar su implicación. Sin embargo, la defensa insiste en que no hay pruebas suficientes y que su detención fue arbitraria y violatoria de sus derechos humanos.
Clamor por justicia y respeto al debido proceso
Los manifestantes exigen al gobierno federal y a las autoridades de Tabasco la liberación inmediata de Amayrani Aguilar y Griselda Trujillo, así como una investigación imparcial y apegada a derecho.
“¡Son inocentes!”, gritaron los asistentes frente a Palacio Nacional, en un llamado urgente por justicia y respeto a las garantías constitucionales de las detenidas.
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