Las autoridades fronterizas de Estados Unidos han estado enviando a niños y niñas migrantes de otros países a México, informó este viernes The New York Times.
Estas expulsiones a los menores, indicó el medio, fueron hechas bajo una política de cierre de fronteras con el fin de evitar que el COVID-19 se propague en EU, pero entran en conflicto con un acuerdo diplomático entre ambos países y el modo en que el Gobierno mexicano acordó ayudar con la orden, la cual estipuló que solo los niños y niñas mexicanas, así como personas con supervisión de adultos, podían ser repatriados al país tras cruzar la frontera.
También apuntó que estas expulsiones ponen en riesgo a los menores provenientes de países como Guatemala, Honduras y El Salvador, quienes son enviados sin la compañía de un adulto a un país que no es suyo, el el cual no tienen conexiones familiares.
Datos públicos citados por el NYT puntualizan que las autoridades estadounidenses han expulsado a más de 200 mil personas desde el cierre de la frontera por salud pública (últimos ocho meses), pero no obtuvo información de la administración Trump sobre cuántos de estos repatriados eran menores ni sobre cuántos fueron enviados a México.
La organización Comisión de Mujeres Refugiadas presentó una solicitud a autoridades mexicanas al respecto, y recibió datos que sugieren que cerca de 208 niños y niñas centroamericanas han sido devueltos a autoridades mexicanas entre el 21 de marzo y el 5 de junio del año en curso, de acuerdo con el medio.
