En una acción coordinada entre la Policía Municipal de Tehuacán, la Secretaría de Marina (SEMAR), la Policía Estatal y autoridades federales, fueron retiradas 12 cámaras de videovigilancia instaladas de manera ilegal en diferentes puntos del municipio.
Estos dispositivos, conocidos como cámaras parásitas, eran utilizados por bandas criminales para espiar la actividad ciudadana, detectar operativos y coordinar delitos. Las cámaras estaban ocultas en postes de la CFE, infraestructura de Telmex e incluso en árboles.
Zonas con alta incidencia delictiva bajo vigilancia ilegal
El operativo de desinstalación se llevó a cabo en zonas de alta incidencia delictiva, como el Parque Poblado El Riego, la calle 7 Poniente esquina con Adolfo López Mateos, así como en las juntas auxiliares de San Lorenzo Teotipilco y Santa María Coapan. En estos lugares se encontraron instalaciones clandestinas y conectadas de forma irregular.
Las cámaras representaban un riesgo para la privacidad y la seguridad de la ciudadanía, pues su orientación estaba enfocada en la vía pública y zonas de tránsito peatonal.
Gobierno municipal refuerza estrategia contra la delincuencia
El presidente municipal Alejandro Barroso Chávez instruyó este operativo como parte de una estrategia integral contra la delincuencia organizada, con el objetivo de recuperar espacios públicos y restablecer el orden.
Esta intervención se suma a las acciones para garantizar entornos seguros, limitar la operación de grupos criminales y devolver la tranquilidad a las familias de Tehuacán.
Llamado a denunciar instalaciones irregulares
La Dirección de Seguridad Pública Municipal hizo un llamado a la ciudadanía para reportar cualquier cámara sospechosa o instalación no autorizada al número de emergencia 911 o al 089 de denuncia anónima.
Hasta ahora, las autoridades han retirado cerca de 70 cámaras parásitas en distintos puntos de la ciudad, sin que ninguno de sus propietarios haya reclamado los equipos.
La participación ciudadana es clave para continuar combatiendo estos sistemas de espionaje criminal que atentan contra la seguridad y privacidad de la población.