Huejotzingo, Pue. Miles de danzantes ataviados de los personajes de zapadores, indios serranos, zacapoaxtlas, turcos y zuavos recorrieron las principales calles de este municipio como desde hace más de 150 años, el cual se ha visto “manchado” por los accidentes, enfrentamientos y el asesinato de cuatro jóvenes en la junta auxiliar de Santa Ana Xalmimilulco, tras asistir al Carnaval de Huejotzingo 2020.
Aunque las autoridades estatales señalan que el posible móvil fue el robo de la unidad en que viajaban, el ambiente de fiesta y alcohol no se vio mermado en esta jurisdicción poblana, donde cada año salen más de 20 mil danzantes o carnavaleros, quienes detonan pólvora a través de un mosquetón.
Con el sol ardiente y quemante del aún invierno, el estruendo de los mosquetones, el aire cargado de polvo y ceniza, el fuerte ruido de la música de banda, muchas personas acudieron a ver esta fiesta de la carne, cuyo Carnaval de Huejotzingo es considerado el más mexicano del país.
Los participantes con ritmo de banda ejecutaban pasos propios de esta festividad, donde se observó nuevamente el robo de la hija del Corregidor, la quema del jacal, los negritos, el casamiento indígena, el señorío huejotzinga, la participación de los batallones de los barrios de la cabecera municipal.
Finalmente, se han reportado algunas riñas, propias de esta colorida fiesta que se sabe salir de control, la cual asombra a propios y extraños, misma que puede gustar o no, a la vez que provoque admiración o indignación, incluso miedo.
