Juan Crisóstomo Bonilla, Pue. La empresa Bonafont pidió a las autoridades estatales y municipales la reapertura de su planta, la cual permanece cerrada por un plantón de vecinos de esta jurisdicción desde el pasado 22 de marzo, tras "acusarla" de secar los pozos de esta región cholulteca.
En un comunicado, el vicepresidente de Asuntos Corporativos de Bonafont, Fabrice Salamanca expuso que la interrupción de esta planta de agua potable afecta a 357 familias, la cual cuenta con un solo pozo de 150 metros de profundidad, que representa el 0.09% de los derechos del agua del acuífero de esta región, cuyos permisos les fueron dados desde el 2004 por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
"La interrupción en las actividades de la planta no solo es arbitraria e ilegal, sino que pone en riesgo el empleo y sustento de cientos de familias, limitando el acceso y distribución de un insumo básico, afectando a mil 200 personas que participan en esta empresa", citó el comunicado de la empresa.
Asimismo, Bonafont dijo comprender las inquietudes de los manifestantes que exponen sobre la escacez del agua, pero -aclaró- que su planta opera totalmente independiente al suministro de agua que se ocupa en Juan Crisóstomo Bonilla.
"Lamentablemente las autoridades no han podido establecer diálogo con los manifestantes para la resolución de este conflicto ajeno a nuestra compañía (...). Solicitamos a las autoridades estatales y municipales atiendan de manera inmediata las preocupaciones de este grupo de personas y que los accesos de la planta sean liberados a la mayor brevedad", concluyó la compañía.
