Una joven de 19 años, identificada como Juana y originaria de Santa María Coapan, permaneció más de 12 horas con su bebé sin vida en el vientre en el Hospital de la Mujer de Tehuacán, sin que se le practicara una cesárea, pese a los insistentes llamados de su familia.
El caso ha sido calificado por los familiares como un grave acto de negligencia médica y anunciaron que presentarán una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado (FGE).
El corazón del bebé aún latía, pero no fue atendida a tiempo
Según el testimonio de Sebastiana Marcelino Feliciano, suegra de la joven, el domingo 20 de junio acudieron al hospital debido a que Juana ya había cumplido su tiempo de gestación. Sin embargo, el personal indicó que tenía poca dilatación y debía regresar más tarde.
Al día siguiente, a las 9:10 horas del lunes, fueron informadas de que la bebé ya había fallecido, aunque no fue sino hasta la madrugada del martes (12:30 a.m.) cuando se extrajo el cuerpo sin vida de la pequeña Odette, que pesó 3.9 kilogramos.
Familia exigió cesárea urgente, pero fue rechazada por médicos
Durante el proceso, los médicos se negaron a realizar una cesárea, argumentando que el cuerpo de Juana debía expulsar al bebé de forma natural, pese al riesgo evidente de infección o complicaciones graves.
Incluso ante la solicitud de traslado a otra unidad, los responsables exigieron una ambulancia, un ginecólogo y testigos, lo cual fue imposible de conseguir a tiempo.
Para la noche del lunes, Juana presentaba fiebre y dolor intenso, pero la atención médica continuó sin cambios, mientras el bebé permanecía en su vientre.
Llamado urgente a las autoridades sanitarias y de justicia
La familia de Juana expresó su preocupación por las posibles secuelas físicas y emocionales para la joven madre, y solicitó la intervención inmediata de las autoridades de salud para evitar que este tipo de casos se repitan.
“No es justo que, por falta de atención o protocolos erróneos, se pierdan vidas inocentes y se ponga en peligro la salud de más mujeres”, expresó la suegra.
El caso ya genera indignación en la comunidad de Tehuacán, donde se espera una respuesta contundente de la Secretaría de Salud y la FGE.
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