Las muertes diarias por el nuevo coronavirus en Nueva York cayeron a 540, el número más bajo reportados en casi dos semanas, informó este sábado el gobernador Andrew Cuomo.
Sin embargo, el funcionario advirtió que la cifra de nuevas hospitalizaciones por el COVID-19 sigue siendo alta, por lo que si se quiere 'suavizar' la cuarentena se necesita un aumento dramático en el número de pruebas que se realizan.
"Mientras más pruebas haya, más información habrá y puedes reabrir la sociedad más", dijo.
El gobernador dijo que Nueva York necesitaba más ayuda del Gobierno federal para ampliar las pruebas, pero se negó a señalar al presidente Donald Trump, quien ha dicho que las pruebas son responsabilidad de los estados.
Cuomo trató de reducir la tensión, argumentando que la nación necesita "unidad" en lugar de división partidista.
"Este es un momento muy tumultuoso, pero en medio de esto no hay tiempo para la política", comentó a periodistas en una reunión informativa en Albany.
El total de muertos en el estado ahora es de 13 mil 362. El número de muertes reportadas este sábado fue menor que las 630 reportadas el día anterior y fue la primera vez que el número de muertes cayó por debajo de 600 en 12 días. El número más alto reportado por Nueva York fue de 799 muertes, el pasado 9 de abril.
Hasta el viernes, la entidad registra 229 mil 642 casos confirmados del nuevo coronavirus.
Cuomo comentó algunos signos positivos en el combate contra la enfermedad, como un menor número de admisiones a salas de emergencia y unidades de cuidados intensivos, así como una disminución en la cifra de personas que necesitan respiradores artificiales.
No obstante, subrayó que las nuevas hospitalizaciones ronda las 2 mil por día.