Estados Unidos impuso de nueva cuenta sanciones a empresas de Irán, China y Emiratos Árabes Unidos por hacer negocios con la Compañía Naviera de la República Islámica de Irán y a tres entidades iraníes por la proliferación de armas convencionales.
Se trata de la última de una serie de medidas destinadas a aumentar la presión sobre Teherán en los últimos días de la Administración del presidente Donald Trump, cuyo mandato terminará el próximo miércoles.
El Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, dijo que Washington había sancionado a siete empresas, incluyendo a la empresa china Jiangyin Mascot Special Steel Co y a la empresa de Emiratos Árabes Unidos Accenture Building Materials, y a dos personas por enviar acero a o desde Irán.
También indicó que la Organización de Industrias Marítimas, la Organización de Industrias Aeroespaciales y la Organización de Industrias de Aviación de Irán habían sido incluidas en la lista negra por la proliferación de armas convencionales.
Pompeo también añadió que se ha aumentado el alcance de las sanciones administradas por el Departamento de Estado contra Irán relacionadas con los metales.
Aquellos que, a sabiendas, transfieran 15 clases de metal -incluyendo ciertos tipos de aluminio y acero- que el Departamento de Estado considere que se emplean en programas nucleares, militares o de misiles balísticos de Irán estarán sujetos a sanciones, dijo.
Durante sus cuatro años en el mandato de Trump se ha tratado de forzar a Teherán a reanudar las conversaciones sobre sus programas nucleares y de misiles balísticos y sus actividades en el Oriente Medio.
Cabe recordar que el republicano renunció en 2018 a un acuerdo nuclear con Irán que Teherán logró con las potencias mundiales en 2015 para frenar su programa nuclear a cambio de un alivio de las sanciones.
