EUA.- Decenas de miles de habitantes de Colorado expulsados de sus vecindarios por un incendio forestal azotado por el viento esperaban ansiosos este viernes para saber lo que quedó en pie de sus vidas, mientras las autoridades informaron que se temía que más de 500 casas fueran destruidas.
Al menos siete personas resultaron heridas, pero no hubo informes inmediatos de muertes o personas desaparecidas después del incendio que estalló en las afueras de Denver el jueves y arrasó los vecindarios afectados por la sequía con una velocidad aterradora, propulsados por ráfagas de hasta 105 mph ( 169 kilómetros por hora).
“Podríamos tener nuestro propio milagro de Año Nuevo en nuestras manos si se mantiene que no hubo pérdida de vidas”, dijo el gobernador Jared Polis, y señaló que muchas personas tenían solo unos minutos para evacuar.
Para la primera luz del viernes, las enormes llamas que habían iluminado el cielo nocturno habían desaparecido, dejando casas humeantes y árboles y campos carbonizados. Los vientos habían amainado y pronto comenzó a caer nieve ligera, lo que generó esperanzas de que pudiera apagar los puntos calientes.
El incendio estalló en Louisville y Superior y sus alrededores, pueblos vecinos a unas 20 millas (32 kilómetros) al noroeste de Denver con una población combinada de 34 mil habitantes. Se ordenó a los residentes que huyeran cuando las llamas se acercaron y arrojaron una neblina naranja y humeante sobre el paisaje.
El incendio forestal estalló inusualmente a fines de año, luego de una caída extremadamente seca y en medio de un invierno casi sin nieve hasta ahora.
Cathy Glaab descubrió que la casa superior que comparte con su esposo, Richard, se había reducido a un montón de escombros carbonizados y retorcidos, el buzón de correo es lo único que queda en pie. Fue una de las siete casas seguidas quemadas hasta los cimientos.
“Solo duro. Tantos recuerdos “, dijo Glaab, sosteniendo su cabeza mientras contemplaba la escena. A pesar de la devastación, dijo, tienen la intención de reconstruir la casa, que tenía una vista de las montañas desde la parte trasera.
El alguacil del condado de Boulder, Joe Pelle, dijo que probablemente más de 500 casas fueron destruidas. Él y el gobernador dijeron que se podrían haber perdido hasta 1,000 casas, aunque eso no se sabrá hasta que las cuadrillas puedan evaluar los daños.
“Es increíble cuando uno mira la devastación que no tenemos una lista de 100 personas desaparecidas”, dijo el alguacil.
El alguacil dijo que algunas comunidades se redujeron a solo “agujeros humeantes en el suelo”. Instó a los residentes a esperar a que todo despejado regresara, advirtiendo que todavía era demasiado peligroso en muchos vecindarios debido a incendios y cables eléctricos caídos.
Sarah Owens, su esposo, su hijo adulto y su perro salieron de su casa Superior a los 10 minutos de enterarse de la evacuación a través de una publicación de Facebook. Pero cuando todos intentaron salir por las sinuosas calles del próspero vecindario de Rock Creek, les tomó 1 hora y media recorrer 2 millas (3,2 kilómetros).
Una vez que encontraron el camino a salvo a un hotel que acepta mascotas, sus teléfonos celulares y computadoras no pudieron proporcionarles lo único que querían saber: ¿Su casa seguía en pie?
“La buena noticia es que creo que nuestra casa puede estar bien”, dijo
“Nunca pensé que un incendio forestal pudiera causar este tipo de destrucción”, dijo Owens. “Quiero quedarme aquí. No importa dónde viva, siempre habrá desastres naturales “.
Mike Guanella y su familia se estaban relajando en su casa en Superior y estaban ansiosos por celebrar una Navidad tardía cuando los informes de un incendio de césped cercano rápidamente dieron paso a una orden de irse de inmediato.
En lugar de abrir regalos, Guanella y su esposa, sus tres hijos y tres perros se alojaban en la casa de un amigo en Denver, con la esperanza de que su casa siguiera en pie.
“Esos regalos todavía están debajo del árbol en este momento, esperamos”, dijo.
Sophia Verucchi y su compañero, Tony Victor, regresaron a su apartamento en Broomfield, en las afueras de Superior, para encontrar que no sufrieron daños graves. Habían huido la tarde anterior con solo la guitarra de Víctor, la ropa de cama y su gato, el señor Gato Blanco.
“Nos fuimos pensando que era una broma. Simplemente sentimos que íbamos a volver. A las 5 en punto, pensamos, tal vez no regresaremos “, dijo Verucchi. Pero recibieron un correo electrónico por la mañana diciendo que estaba bien regresar.
“Al ver las noticias y ver todas las casas quemadas, nos sentimos muy afortunados”, dijo Verucchi.
Las dos ciudades están llenas de subdivisiones de clase media y media alta con centros comerciales, parques y escuelas. El área está entre Denver y Boulder, sede de la Universidad de Colorado.
A última hora de la mañana del viernes, el incendio había quemado al menos 24 kilómetros cuadrados (9,4 millas cuadradas), pero parecía estar contenido, dijo el alguacil.
Los científicos dicen que el cambio climático está haciendo que el clima sea más extremo y que los incendios forestales sean más frecuentes y destructivos.
Por lo general, los incendios forestales de Colorado no han sido tan acaparadores de titulares como los de California que han destruido miles de hogares. Pero el año pasado, el estado vio una temporada de incendios forestales sin precedentes, con tres de los incendios más grandes en la historia del estado. Aquellos estaban principalmente en áreas montañosas, no en subdivisiones suburbanas.
Anticipándose a una larga temporada de incendios este año, los legisladores de Colorado reservaron millones para más equipos y otros recursos, incluida la extensión de contratos para aviones cisterna y helicópteros.
Front Range de Colorado, donde vive la mayor parte de la población del estado, tuvo un otoño extremadamente seco y suave, y el invierno ha sido mayormente seco hasta ahora. Denver estableció un récord de días consecutivos sin nieve antes de que recibiera una pequeña tormenta el 10 de diciembre, su última nevada antes de que estallaran los incendios forestales.
El noventa por ciento del condado de Boulder se encuentra en una sequía severa o extrema, y no ha visto lluvias sustanciales desde mediados del verano.
Guanella dijo que escuchó de un amigo bombero que su casa todavía estaba en pie el jueves por la noche. Pero todo lo que pudo hacer fue esperar.
A última hora de la mañana del viernes, el incendio había quemado al menos 24 kilómetros cuadrados (9,4 millas cuadradas), pero parecía estar contenido, dijo el alguacil.
Los científicos dicen que el cambio climático está haciendo que el clima sea más extremo y que los incendios forestales sean más frecuentes y destructivos.
Por lo general, los incendios forestales de Colorado no han sido tan acaparadores de titulares como los de California que han destruido miles de hogares. Pero el año pasado, el estado vio una temporada de incendios forestales sin precedentes, con tres de los incendios más grandes en la historia del estado. Aquellos estaban principalmente en áreas montañosas, no en subdivisiones suburbanas.
Anticipándose a una larga temporada de incendios este año, los legisladores de Colorado reservaron millones para más equipos y otros recursos, incluida la extensión de contratos para aviones cisterna y helicópteros.
Front Range de Colorado, donde vive la mayor parte de la población del estado, tuvo un otoño extremadamente seco y suave, y el invierno ha sido mayormente seco hasta ahora. Denver estableció un récord de días consecutivos sin nieve antes de que recibiera una pequeña tormenta el 10 de diciembre, su última nevada antes de que estallaran los incendios forestales.
El noventa por ciento del condado de Boulder se encuentra en una sequía severa o extrema, y no ha visto lluvias sustanciales desde mediados del verano.
Guanella dijo que escuchó de un amigo bombero que su casa todavía estaba en pie el jueves por la noche. Pero todo lo que pudo hacer fue esperar.
“Solo está esperando saber si su restaurante favorito sigue en pie, si las escuelas a las que van sus hijos siguen en pie”, dijo. “Solo estás esperando tener algo de claridad”.
