Después de 700 días de llevarlo puesto, mañana España dirá adiós al cubrebocas en interiores y únicamente será obligatorio utilizarlo en hospitales, centros asistenciales y transporte público.
El gobierno socialista de Pedro Sánchez aprobó hoy en su Consejo de Ministros el fin del uso obligatorio del cubrebocas y se hará efectivo a partir de mañana, cuando se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
De esta forma, y tras dos años de pandemia de covid-19, España da un paso crucial en lo que se refiere al control de la situación epidemiológica derivada de la crisis del coronavirus.
Según el documento de la Ponencia de Alertas del Ministerio de Sanidad, la probabilidad de transmisión en ausencia de cubrebocas puede ser elevada y el impacto podría ser moderado, teniendo en cuenta la diversidad de personas expuestas, entre las que podría haber vulnerables, por lo que se recomienda su uso en este tipo de personas.
Los expertos señalan además que, tanto en menores de 12 años como en mayores, el impacto directo de un incremento de la transmisión es muy bajo o más bajo que en la población en general. Además, se subraya que en estos grupos de edad el uso de tapabocas ha tenido un impacto negativo importante en el bienestar o en la interacción social y el desarrollo personal.
En cualquier caso, el gobierno pidió a los españoles que siga haciendo un uso responsable del cubrebocas, de forma especial entre la población vulnerable. Por ejemplo, en el entorno familiar, en las reuniones de amigos o las celebraciones privadas, cuando haya “situaciones de riesgo”.
De la misma forma, se apela a un uso responsable en aquellos espacios cerrados de uso público, como centros comerciales, supermercados o pequeños comercios.
Asimismo, se recomienda usarla en cines, teatros, salas de conciertos, museos,entre otros recintos cerrados o en los que las personas estén bebiendo y comiendo, como bares, restaurantes o locales nocturnos.
En cuanto a los centros de trabajo, siempre y cuando no se pueda mantener la distancia de metro y medio, deberá ser la empresa la que determine el uso del cubrebocas.
