Por razones “humanitarias” y de salud, Raymundo Romero, quien fuera secretario general del gobierno de Chihuahua, en el sexenio del exgobernador César Duarte, deberá pasar al menos seis meses en prisión domiciliaria, para enfrentar la acusación porpeculado agravado y tráfico de influencias, por la que fue detenido horas antes de la Nochebuena.
En la audiencia de formulación de imputación que concluyó la noche del miércoles, el juez de control determinó que esta medida cautelar se aplica a petición de la defensa del imputado, la cual argumentó que la avanzada edad (75 años) del acusado y el cáncer fase 4 que padece, pondrían en mayor riesgo su salud, en caso de que fuera recluido en un Centro de Reinserción Social.
Durante la estancia en su domicilio, el exfuncionario tendrá vigilancia permanente de elementos de la Fiscalía General del estado, para evitar que se sustraiga de la justicia.
Se estableció además que el próximo lunes a las 9:30 horas será presentado de nueva cuenta en el juzgado en audiencia de vinculación a proceso.
Al exfuncionario le fueron formulados cargos de peculado agravado y tráfico de influencias, por presuntamente inducir a integrantes de un Comité Inmobiliario a que aprobaran la compra de un terreno en el municipio Guachochi entre los años 2013 y 2014, por el cual el gobierno estatal pagaría 20 millones de pesos, cuando su costo era de cinco.
Romero habría promovido la autorización de esta compra, para que el entonces gobernador César Duarte pudiera cumplir con un compromiso personal.
