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Mexicanos que temen a COVID-19 se encomiendan al Santo Niño Doctor de Tepeaca

Los mexicanos han decidido encomendarse al Santo Niño Doctor de Tepeaca ante el temor que les ocasiona la pandemia de coronavirus COVID-19 por la que atraviesa nuestra nación.

Esta nueva enfermedad trastocó nuestra cotidianidad y, a nivel mundial, ha dejado más de 22 millones de contagiados y aproximadamente 783 mil muertos.

Ante la incertidumbre causada por el coronavirus COVID-19 y debido a que hasta el momento no hay una cura completamente efectiva, muchos mexicanos decidieron refugiarse en esta figura religiosa.

El Santo Niño Doctor de Tepeaca mide apenas 12 centímetros y es venerado desde los años cuarenta del siglo pasado, pues supuestamente cumplió varios milagros a pacientes de un pequeño hospital.

En fechas recientes ha tomado popularidad esta deidad, pues es común ver imágenes de un “Niño Dios” vestido como médico e incluso con un traje que simula al de los profesionales de la salud que atienden a pacientes con coronavirus COVID-19.

¿Por qué se venera al Santo Niño Doctor de Tepeaca?

La leyenda cuenta que el Santo Niño Doctor fue llevado al municipio poblano de Tepeaca por la hermana Carmen Barrios Báez, quien se lo ganó en una rifa.

La mujer pertenecía a la Orden de la Josefinas y, junto a otras dos religiosas, fue enviada al municipio poblano de Tepeaca para atender enfermos en el pequeño hospital de la región.

Una vez ahí ella decidió poner una pequeña capilla donde colocó al “Niño Dios” para que familiares de los enfermos pudieran rezarle y pedirle por la salud de los pacientes.

Luego de unos meses muchos de los recluidos en el nosocomio coincidieron en que un pequeño acudía a darles medicina y los visitaba con frecuencia para ayudarlos a sanar.

Fue así como la religiosa se acercó a la figura y descubrió que tenía los zapatos gastados. Desde ese entonces los mexicanos lo nombraron el Santo Niño Doctor de Tepeaca.