Este jueves, levantaron su campamento, que instalaron el 17 de febrero, y regresan a su lugar de origen las más de 300 personas desplazadas de Guerrero que se encontraban afuera de Palacio Nacional.
Ellos platicaron con la Secretaría de Gobernación (Segob) con quien lograron un acuerdo para su seguridad y una pensión alimenticia de 5 mil pesos mensuales por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, dijeron algunos a Reforma.
Lo desplazados, pertenecientes a los municipios Leonardo Bravo y Zitlala volverán a Chichihualco, donde estaban refugiados antes de viajar a la Ciudad de México, según lo reporta Teodomira Rosales.
La integrante del Centro Regional de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez comentó que el Gobierno federal les pagará la renta de una vivienda, por lo que ya no regresarán a las casas de campaña que habían instalado.
Intensa estrategia de seguridad
En Chichihualco estarán por tres meses… en ese tiempo el Gobierno federal implementará una estrategia de seguridad más intensa para replegar a los grupos armados que irrumpieron en sus comunidades.
Uno de los afectados expresó su satisfacción por el acuerdo al que se llegó con el Gobierno federal y así lo expresó a Reforma:
Fue en la madrugada cuando los desplazados iniciaron el levantamiento del campamento, destaca César Martínez en su nota.
