Por: Cortesía

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Fake news: futbolista iraní no fue ejecutado como han difundido en redes sociales

Varias publicaciones que se difunden en redes sociales afirman que el futbolista iraní Amir Nasr Azadani ha sido ejecutado. Sin embargo esta afirmación es falsa, su fotografía ha sido usada en lugar de la del joven Majid Reza Rahnavard, quien sí murió ahorcado en Mashad, Irán.

Una de las cuentas que desinforma publicó: “Se cumplió la condena y el mundo deportivo no se manifestó… Paz a su Alma”. Dicha publicación se acompañó con una imagen que contiene dos fotografías y un texto.

La parte con texto dice: “Un minuto de silencio en nuestros corazones… Fue ejecutado en plena calle, en Mashad, Irán, Majid Reza Ranahvard, de 23 años condenado a muerte por defender los derechos de la mujer. Sus últimas palabras: ‘No quiero que lloren sobre mi tumba, ni que lean el Corán o recen’ Descansa en paz”, se lee en la imagen.

Una de las fotografías que acompañan la publicación corresponde a la del joven Amir Nasr Azadani, de 26 años y la otra es un video de otro joven que tiene los ojos cubiertos por una venda y cuya imagen corresponde a la captura de pantalla de un video en el que, supuestamente, el joven estaría diciendo sus últimas palabras.

Es por ello que la publicación ha provocado confusión entre los usuarios, ya que la fotografía del joven futbolista dio la vuelta al mundo en días recientes, luego de que se difundiera ampliamente la noticia de que el régimen iraní había condenado al joven a la pena de muerte debido a su participación en las protestas para defender los derechos de las mujeres. Incluso la cantante Shakira se pronunció al respecto.

“Hoy en la final de la Copa del Mundo, solo espero que los jugadores en el campo y el mundo entero recuerden que hay un hombre y compañero de fútbol llamado Amir Nasr, en el corredor de la muerte, solo por hablar a favor de los derechos de las mujeres” expresó en Twitter la cantante colombiana.

Sin embargo, el futbolista Amir Nasr Azadani no fue ejecutado, a quien realmente se refiere dicha noticia es a Majid Reza Rahnavard, el segundo de las dos personas vinculadas a las protestas que han sido ejecutadas en Irán.

Majid Reza, de 23 años, es la primera persona detenida en las protestas recientes que ha sido ejecutada en público. El joven murió ahorcado en una grúa a 23 días de su arresto el 19 de noviembre, tras haber sido acusado de matar a dos miembros de la milicia paramilitar Basij y bajo el cargo de “enemistad con Dios”. 

El primer manifestante en morir a manos de la justicia iraní fue Mohsen Shekari, también de 23 años, pero él fue ejecutado en la cárcel “por el mismo delito y una acusación similar”, según menciona el diario español El País.

Sin embargo, de acuerdo con la Agencia de Noticias de la República Islámica (IRNA) al joven futbolista Amir Nasr Azadani se le acusa de “rebelión armada” y de estar relacionado con el asesinato de tres oficiales de seguridad durante las protestas en la ciudad de Isfahan el pasado 16 de noviembre. 

Este mismo medio estatal señala que el presidente del Tribunal Supremo de la provincia de Isfahán, Asadolá Yafari, ha negado que Nasr Azadani haya sido condenado a la pena de muerte, ya que aunque “se ha emitido la acusación”, “aún no se le ha dictado sentencia”.

Esta ola de detenciones se han llevado a cabo en Irán a raíz de las protestas desatadas por el asesinato de Mahsa Amini en septiembre. Amini, quien tenía 23 años, fue detenida por la llamada policía de la moral “encargada de hacer respetar el estricto código vestimentario de la República islámica para las mujeres, en particular el porte del velo en público”.

De acuerdo con CNN “al menos 43 personas”, incluido el futbolista Nasr-Azadani, “podrían enfrentarse a una ejecución inminente” en Irán.

Por lo tanto, de acuerdo con la información de la que disponemos hasta este momento, es falso que el joven Amir Nasr Azadani haya sido ejecutado por el régimen iraní. Diversas publicaciones utilizaron inadecuadamente una fotografía de Nasr Azadani para referirse a la ejecución de Majid Reza Rahnavard.