Por: Cortesía

Ómicron aplasta a Hong Kong con la peor ola de Covid-19 que inició la pandemia

En Hong Kong, al sureste de China, las calles están inundadas con camillas. A pesar de la política Zero-COVID, ómicron está devastando el territorio.

Las imágenes son contundentes. En Hong Kong, al sureste de China, las calles están inundadas con camillas. Sobre de ellas, personas cubiertas con mantas y respiradores aguardan un lugar en el hospital, mientras la infraestructura de salud pública está al borde del colapso. En contra de todo pronóstico, y a pesar de la política Zero-COVID que implementaron las autoridades locales, el territorio sufre la peor crisis de coronavirus desde que inició la pandemia. A todas luces, ómicron está devastando Hong Kong.

¿Qué es la política Zero-COVID?

El lunes 3 de enero de 2022, la variante genética de COVID-19 ómicron fue declarada como ‘el virus con la propagación más rápida en la historia’. Mandatarios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertaron que, a pesar de que parecía menos mortal que otras, estaba generando “un tsunami de casos” alrededor del mundo.

Aún así, Hong Kong hizo frente a la ola de ómicron con su política Zero-COVID. Ésta es una estrategia de contención, para evitar que el virus se propague en las ciudades más densamente pobladas. En todo China, se realizaron bloqueos estrictos, así como rondas de pruebas masivas.

Especialmente en las ciudades grandes, la población ha tenido que someterse a medidas rigurosas de encierro otra vez. En lugar de promover las compras y salidas a comer, el Estado presionó para que la gente pidiera todo a casa. En el peor momento, tuvieron que “conformarse con entregas intermitentes de alimentos y medicinas“, según reporta Nature.

¿Un error olímpico?

Comercios, bares, escuelas y centros recreativos tuvieron que cerrar sus puertas hacia finales de diciembre de 2021. Incluso a pesar de todas estas medidas sanitarias, esta semana las autoridades de Hong Kong reconocieron que Ómicron está siendo un obstáculo mucho mayor de lo que se esperaba en un inicio. Particularmente, en medio de los Juegos Olímpicos de Invierno.

Con esto en mente, investigadores de varias universidades en China se cuestionaron si esta estrategia de contención pandémica sería lo suficientemente sólida para enfrentar a Ómicron. Hong Kong demostró lo contrario.

“Ómicron va a crear un mayor desafío y generará más interrupciones que las variantes anteriores”, dijo a Nature Ben Cowling, epidemiólogo de la Universidad de Hong Kong. “Los Juegos Olímpicos van a ser una gran prueba”.

Según las cifras de CNN, la ciudad rompió récords con más de 4 mil 300 casos al día, cuando llevaban una racha de apenas 200 desde hace meses. En respuesta, el gobierno local mandó que todas las personas con COVID-19 fueran hospitalizadas —independientemente de su condición.

Así, en cuestión de días, 17 de los hospitales más importantes de Hong Kong alcanzaron su ocupación máxima. Esta decisión estatal les obligó a realizar guardias en el exterior, ya que las camas estaban completamente ocupadas, y los pacientes siguen llegando. En los próximos días, la situación se hará todavía más difícil, pues se esperan lluvias potentes y bajas en la temperatura.

¿Y los Juegos Olímpicos de Invierno?

Hasta ahora, las autoridades de Hong Kong han mostrado su preocupación por la ola de Ómicron en términos de su población local. Sin embargo, los Juegos Olímpicos de Invierno 2022 no han terminado. Por el contrario, se espera que los atletas sigan compitiendo hasta que los eventos deportivos lleguen a su fin.

Para ello, “estarán confinados en una ‘burbuja’, volando en vuelos chárter, viajando desde sus hoteles a instalaciones deportivas en vehículos exclusivos y siendo sometidos a pruebas diarias”, documenta Nature. Paralelamente, China estará mandando profesionales de la salud y suministros a la ciudad para construir nuevos espacios de aislamiento para todos los demás.

“Estamos decididos a trabajar en equipo y no escatimar esfuerzos en la lucha contra esta epidemia para que la gente de Hong Kong retome pronto su vida normal”, dijo en un comunicado Carrie Lam, directora ejecutiva de Hong Kong.

En contraste, las autoridades médicas locales aseguran que Hong Kong tendrá 28 mil casos diarios de Ómicron hacia finales de marzo. Hoy, la preocupación está en que, a pesar de la situación, hay personas de la tercera edad que siguen dudando de las vacunas. En las calles, las camillas siguen llegando con pacientes infectados. Con cada día que pasa, serán más.

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