El sendero de las parafilias

Por: Brenda Serrano Trujillo.

A lo largo del tiempo, la percepción de las prácticas de las parafilias se ha transformado, lo que en la antigüedad era castigado o condenado, en la actualidad es considerado una práctica común como la masturbación o sexo oral, así como otros tipos de sexo, diferentes al coito que establece la unión entre un hombre y mujer.

En siglos anteriores, las parafilias eran realizadas secretamente, pero siempre han existido. Desde aquéllas épocas, la imaginación del humano no se ha limitado, es una herramienta que nadie puede controlar, ni siquiera la persona que imagina. Sin embargo, las manifestaciones del pensamiento y las acciones sí pueden ser reprimidas por los mismos individuos o paradigmas sociales. En los últimos años, hay más apertura ante dichos conceptos; pero, depende del contexto e ideología de cada sujeto la visión que se tenga acerca de estos comportamientos sexuales.

Se preguntó a 4 personas de diferentes edades (una joven de 26 años, un adulto de 37 años, un adulto mayor de 57 años y otro de la tercera edad de 65 años) si sabían qué eran las parafilias, el conocimiento que tienen acerca de la mismas, sí habían practicado alguna de ellas, el pudor que les puede producir hablar de ese tema de la sexualidad, si es necesario que sean partícipes en el acto sexual y la condena o percepción actual de la sociedad antes las filias.

Se busca comparar si el rango de edades interviene con la práctica de las parafilias y la percepción de las mismas. La persona joven y la adulta mayor aseguran tener conocimiento de la mayoría de ellas, aunque hay una gran diversidad, pero el adulto de 37 años y el de 65 años no sabían que a esas prácticas se les denominaba de esa manera. Es decir, conocen ese tipo de conductas sexuales por lo que escuchan o ven en el cine, las noticias o medios comunicativos pero desconocen los detalles del término.

La encuesta fue realizada a tres mujeres y un hombre, el adulto joven. Se determinó que las dos mujeres más jóvenes pertenecen a un status socioeconómico medio, con grado en licenciatura la más pequeña y la adulta mayor con grado en doctorado. El nivel de estudios también interfiere en la percepción de las parafilias. Ellas logran comprender estos conceptos, así como a las personas que los practican, pero no les agrada participar, especialmente para aquellos actos que implican lastimar al otro, incluso en escenarios criminales, ya que la autoasasinofilia trata de que la excitación es producida cuando las personas fantasean con ser asesinados o imaginan su propia muerte.

Algunas de las parafilias son:

CLASTOMANÍA: EXCITACIÓN AL ARRANZAR Y ROMPER LA ROPA INTERIOR Y MEDIAS DE LA PAREJA.

CROPOFILIA: EXCITACIÓN POR EL EXCREMENTO.

HIPNOFILIA: EXCITACIÓN POR LAS PERSONAS DORMIDAS.

MASOQUISMO: PLACER LIGADO A LA PROPIA HUMILLACION O SUFRIMIENTO FÍSICO (CACHETADAS, LATIGAZOS) O MORAL.

NECROFILIA: EXCITACIÓN POR LOS CADÁVERES.

ZOOFILIA: EXCITACIÓN POR LOS ANIMALES. TAMBIÉN LLAMADA BESTIALISMO.

NOSOLAGNIA: EXCITACIÓN PROVENIENTE DE SABER QUE LA PAREJA TIENE UNA ENFERMEDAD TERMINAL.

PEDIOFILIA: EXCITACIÓN POR LAS MUÑECAS.

PEDOFILIA: EXCITACIÓN POR LOS MENORES.

AUTOGONISTOFILIA: CREAR SITUACIONES EN LAS QUE OTRAS PERSONAS PUEDAN VERTE DESNUDO POR ACCIDENTE.

El masoquismo es una de las parafilias más conocidas. Los tres entrevistados (joven, adulto joven y mayor) expresan su interés en estos actos, pero con golpes y humillación en menor grado.

El adulto mayor casi no tiene conocimiento acerca de las parafilias. Indica haber practicado algunos fetiches sexuales, los cuales se asemejan en algunas definiciones, pero son más inofensivas, ya que el centro del placer está

relacionado con alguna otra prenda de vestir o del cuerpo, pero no trasciende el plano de la violencia o criminalidad.

Sin embargo, fue el más interesado de los cuatro interrogados. Se concluyó que el género influye en la impresión de estos actos. La mujer es más reservada, en ocasiones más sumisa o apartada de hablar de estas temáticas, si lo hace será de forma privada o a quienes les profese más confianza. El hombre entabla una conversación más profunda y devuelve más preguntas acerca de las parafilias, ya que en general no teme compartir su sexualidad, incluso hay quien se jacta de sus andanzas o hazañas sexuales.

La persona de la tercera edad fue la que mostró más rechazo ante las parafilias, no sabe lo que significan, después de que se le explica el concepto asegura no haber practicado alguna, se refleja extrañeza en su rostro y se niega a completar el cuestionario. No tiene más interés en conocer. No todos lo de dicha edad poseen el mismo razonamiento, pero la mayoría desaprueba estas ideas. El estatus bajo y medio manifiesta desdeño y vergüenza ante estas prácticas por la educación que han recibido, y la enseñanza religiosa, factor que se interpone en demasía en la plática del tema.

Todos coinciden en que son mal vistas o consideradas un pecado por la sociedad, pero la evolución sí es evidenciada, a partir de las épocas pasadas y la actualidad. En las obras del Marqués de Sade son retratadas explícitamente, más tarde el autor fue encarcelado. En el nuevo siglo ya no habría condena de ese tipo si alguien escribe un libro de parafilias, perversidades o transgresiones. Pero ha surgido una problemática, la diferencia entre el libertinaje y la libertad, las personas que las practican creen que están ejerciendo el derecho a su libertad, pero sólamente es válido practicar alguna de ellas si no se lastima a terceras personas y en caso de hacerlo que los participantes estén de acuerdo, a sabiendas de las posibles consecuencias.

Para leer el Marqués de Sade es necesario poseer un criterio amplio, trae una advertencia en el prólogo, ya que el lector puede confundir lo relatado en esas

hojas con la realidad. Así que se incita a conocer más de las parafilias con el objetivo de ampliar el panorama sexual, para que cada quien elija practicarlas o no, según la excitación o gravedad que pueda producir y que se dialogue acerca de las mismas sin pudor, libres de estereotipos o prejuicios. Pero no con el propósito de generar una conducta desviada sexualmente.

Más adelante se retomará el hilo de la sexualidad, abordando la delgada línea entre libertad sexual y libertinaje sexual.

Ejemplos de parafilias buscados https://metalgalamoth.wordpress.com/2012/02/25/100-parafilias-extranas/