Explorando los mundos literarios

Foto: Brenda Serrano Trujillo

Por:  Brenda Serrano Trujillo.

Se pretende dar a conocer la frecuencia o la poca frecuencia de las visitas a la librería Profética, los libros comprados y la perspectiva del librero Diego Espejel Visconti, estudiante de Antropología y amante de las humanidades.

Entrevista al joven Diego Espejel Visconti, trabajador por el turno vespertino, en la librería Profética.  El pasado lunes 07 de agosto de 2017 se entrevistó en el Paseo de San Francisco, a uno de los trabajadores de la librería Profética, ubicada en la calle 3 sur 701, en el Centro Histórico de la Heroica Puebla de Zaragoza, 72000.

CONCURRRENCIA A LA LIBRERÍA PROFÉTICA

El joven Diego empezó a trabajar allí desde el 13 de abril de 2014. La compra de libros y la asistencia a este pequeño refugio literario, varía según la temporada, por ejemplo la época veraniega y  navideña son las más demandadas. En el último mes del año, la gente se encuentra entusiasmada por los intercambios y considera que un libro será un buen regalo.

Por otro lado, en la segunda estación del año los jóvenes lo adquieren como entretenimiento y con el fin de sucumbirse en un mundo diferente al real y presente; los padres acuden con sus hijos como un intento de iniciación en los lares de las letras, pero al final lo que más buscan son libros de textos, solicitados por la lista de útiles en las escuelas. Sin embargo, Profética no se especializa en dichos contenidos. Jóvenes estudiantes y profesionistas, y familias en domingo, es el público que más asiste a la librería.

Best sellers es el género más requerido, así como obras de literatura contemporánea, comprados por aquellos que ya conocen la prioridad de Profética. Cuenta con servicios como tienda en línea y portal amazon. Los días predilectos en venta son los que tienen un motivo de celebración del algún autor, por ejemplo la semana de Juan Rulfo.

A lo largo de la entrevista, estas fueron las primeras impresiones que pudo compartir el librero Diego.

PANORAMA SOCIAL E INTELECTUAL DEL LIBRO

Posteriormente, se abordó el tema de la conservación de los libros. ¿Qué se prefiere en la actualidad el libro digital o el libro físico? A pesar, de que la tecnología ha avanzado, asegura que el amante literario  aun le agrada seguir coleccionando tomos en las estanterías, incluso se convierte en un objeto decorativo. No se aparta de la posibilidad de conseguir un texto por medio digital o pdf, por facilidad económica o de tiempo; no obstante, comparte que no ha afectado mucho a la disminución de compra.

Diego es partidario de las editoriales pequeñas, es preferible gastar en un libro de bajo costo, para prevalecer la industria. “México es un país que no está acostumbrado a las lecturas”, fueron las palabras emitidas por el entrevistado. Es por misma razón, que se cuestiona el hábito lector, así como las preferencias por exponer contenidos de youtubers, y las pocas oportunidades para los escritores en ciernes, únicamente los que se encuentran en las altas esferas tienen más posibilidades de trascender.

Se preguntó acerca de la visión del pseudo- intelectual, y la persona que le apasiona la literatura, especialmente en la ciudad de Puebla. Hay una delgada línea entre estos dos conceptos. El primero adopta un rol, aparenta, su prioridad no es conocer la literatura y ahondar en ella, se le denomina farsante de la literatura. El segundo es aquel que no necesita jactarse ante la audiencia o las personas acerca de los libros que conoce; simplemente profundiza y aprende. Es un factor que influye entre los estudiantes de Puebla, ya que hay una gama de Universidades, muchos de ellos actúan como “pseudo- intelectuales”, especialmente en el área de humanidades. Pero, “no es una regla general” agrega Diego.

 “Leer es una actividad burguesa” comparte el joven Diego, en el diálogo respecto a los estereotipos y prejuicios en torno a la literatura, ya que en repetidas ocasiones son una barrera para que las personas se interesen por ella. Una persona de clase baja intenta sobrevivir, día a día, vive en continua explotación en su trabajo y para satisfacer sus necesidades básicas. Es difícil que tenga accesibilidad a los libros, o que sea su prioridad esa rigurosa actividad, ya que el tiempo restante lo utiliza para dormir o ver televisión.

Por otra parte, se considera que si un lector es amante de los best- sellers (Juegos del hambre, El Señor de los anillos, Harry Potter, entre otros), es un lector comercial, y no es capaz de adentrarse en otros géneros. El librero no está de acuerdo con ello, se opone a las generalizaciones. Lo considera estereotipo entre géneros.

FOMENTO, PRESIÓN Y CULTURA LITERARIA

¿Qué tipo de mensajes genera  la publicidad de Gandhi?

Foto: Internet

Diego concreta que produce una especie de identidad esta publicidad, ya que los consumidores de libros sienten apego a las leyendas o frases que promociona Gandhi, porque se sienten parte del círculo de lectores y no de la “borregada”, aquellas personas ignorantes que no cultivan su pensamiento, se dejan dominar por el denominador común y creen todo lo que escuchan o ven. La publicidad de Gandhi es una buena herramienta porque incita a la lectura; pero, no es suficiente para aumentar el número de lectores. En ocasiones, implementa un estatus social o un grado de ingeniosidad; el hecho de que se interesen  por la publicidad o sea atractiva no implica que compren un libro.

Recomendaciones para la iniciación de la lectura

“Hay que desaparecer el estigma de que solamente lee la gente inteligente, ‘cultureta’, profesional o con cierto nivel de estudios”. 

Hace algunos años, cuando Diego cursaba la preparatoria, no le gustaba inmiscuirse en el mundo de las letras, le parecía aburrido y pesado. Una vez que ingresó a la carrera de antropología, y observaba como otros compañeros leían los empezó a imitar y a interesarse por algunas obras. Se le pregunta directamente al librero si hay una sugerencia específica para fomentar la lectura. El contexto en el que se rodea cada individuo es fundamental para impulsar dicha tarea, así como él tuvo la curiosidad de asomarse a los textos literarios por influencia de sus colegas.

Lo mismo recomienda entre padres e hijos, no solamente que el papá o mamá lea a sus hijos por las noches historias o cuentos de niños, sino que los padres lean para ampliar su conocimiento y tengan la capacidad para saber que enseñarle a sus pupilos, de tal manera, que hagan recomendaciones propias de padres a hijos.

          “Yo no recomiendo un género en específico, se debería experimentar de todo en la literatura para poder desechar lo que no agrada y ser más selectivo, pero se debe  conocer. A los mexicanos les diría que antes de elegir a un escritor francés o inglés, primero leamos a los escritores mexicanos más importantes como: Octavio Paz, Juan Rulfo, Carlos Fuentes, Gabriel García Marqués o escritores latinoamericanos”.

Fue lo que respondió el joven literato, en el momento en que se le solicitó que aconsejara al público algunos títulos para leer.

Se requirió al entrevistado que compartiera alguna anécdota interesante o graciosa, durante su estancia en Profética. No dudó ni un instante. Ocurrió la semana pasada. Dos muchachas acudieron a la librería, en busca de un ejemplar como obsequio para una amiga, pero no sabían que libro elegir. Le pidieron ayuda a él. Las chicas pretendían generar un sentimiento de paz y felicidad para la persona que recibiría el regalo. Diego sugirió “Bajo la misma estrella”. Ellas se miraron y una comentó: “Creo que será necesario contarte el contexto de nuestra amiga, padece cáncer y queremos ofrecerle algo que la reconforte”. Se quedó dudoso, un poco apenado pero les dijo que podría ser útil y eficaz un libro de poema de Jaime Sabines. Ellas aceptaron, agradecidas y lo compraron. Este suceso conmovió mucho a Espejel.

Finalmente ¿Profética tiene futuro o necesita un empuje para una posible reivindicación? Se afirma, a partir de las conclusiones y respuestas del joven Diego Espejel Visconti, que a pesar de ser una librería pequeña aun aporta un buen número de libros, edición y demanda en la literatura. Es razonable que, a veces, prefieran surtir a otras librerías que tienen mayor comercialidad, pero Profética sigue conservando el toque acogedor y literario. La ubicación céntrica y la popularidad permiten el mantenimiento de este espacio de las letras, está a tiempo de seguir avanzando y por último, hace una invitación general para que las personas acudan al mismo.