Siete secretos para usar las redes sociales en los negocios

1.- TENER CLARO EL OBJETIVO: Cada red tiene su función y antes de lanzarse al agua es importante determinar qué se quiere lograr exactamente con cada red. Por ejemplo: No sólo se debe de pensar en Facebook y Twitter como plataformas. Flickr, permite compartir fotos, imágenes de la empresa o producto. Mientras que Youtube permite vídeos personales o institucionales y puede tener su propio canal. También está Livestream que ofrece transmisiones en vivo, resulta muy útil porque la gente quiere ser parte de las noticias directamente.

2.- ROMPER LOS PREJUCIOS: Frecuentemente la brecha generacional entre jóvenes y adultos, origina que éstos últimos consideren que estar en las redes sociales, es una pérdida de tiempo y no es verdad. Por el contrario, hoy por hoy son canales estratégicos para hacer mercadeo.

3.- ESTABLECER LOS CONTENIDOS: Es vital tener claro que va a decir y porque. Las redes sociales son interacción directa, si alguien habla, alguien escucha. Lo importante es tener contenido entretenido, oportuno y fresco.

Todo se resume en crear argumentos para opinar y discutir.

4.- IDENTIFICAR LA MEJOR OPCIÓN PARA SU NEGOCIO: Por ejemplo, Twitter es unidireccional. si uno quiere, puede solo trinar lo que desea y no aceptar mensajes directos. Esto es muy efectivo para empresas que quieren lanzar promociones puntuales.

Ejemplo: el menú del día en un restaurante específico.

5.- RESPONDER RÁPIDA Y EFICAZMENTE: Facebook crea una comunidad, donde todos los miembros tienen el derecho a su opinión, la gente va a contar que quiere, que piensa y lo más importante que siente sobre su producto o empresa, y si no los escucha o no les responde oportunamente la comunidad muere. Por eso es vital contestar oportunamente.

6.- TENER UN GRUPO DE ANFITRIONES: Una manera de premiar a aquellos seguidores que participan activamente es darles la categoría de anfitriones. Con lo cual ellos ejercen como líderes y defienden la marca.

7.- TENER UN COMUNITY MANAGER: Uno de los errores más frecuentes cuando las compañías entran a las redes sociales es dejar esa responsabilidad a una persona que si bien tiene habilidades tecnológicas, no tiene el criterio para medir el impacto y dimensión de cada palabra que se dice en la web.